Estímulos para empresas más humanas… y más competitivas. Gara. Juan Manuel Sinde
06/10/2025
Estímulos para empresas más humanas… y más competitivas
El pasado 17 de junio se celebró en Donosti el último acto de entrega de los Premios Arizmendiarrieta Sariak 2025 a sus ganadores que, recordemos han sido los siguientes: en la categoría de empresas, Sirimiri (Araba), Arteche (Bizkaia), Grupo Egile y Lantik (Gipuzkoa) y Grupo Enhol (Nafarroa) y en la de entidades sin ánimo de lucro, Fundación Jeiki (Araba), Fundación Gizakia (Bizkaia), Gautena y Katealegaia (Gipuzkoa) y Tasubinsa (Nafarroa). (A destacar la composición de los Jurado, con personas de primer nivel, representativas de las Diputaciones Forales y Gobierno de Navarra, Cámaras de Comercio de los 4 herrialdes, las Universidades de Deusto, Navarra y Pública de Navarra, Mutualia, el Cluster del Conocimiento GAIA, representantes de las entidades ganadoras de años anteriores, varias Cáritas diocesanas. Sareen Sarea, con un total de 56 personas de 53 instituciones implicadas,…).
Conviene recordar que, según el planteamiento filosófico de los citados Premios, éstos quieren distinguir a las empresas y entidades sin ánimo de lucro que están implementando los valores inspirados en el humanismo, así como los sistemas de gestión del mundo cooperativo surgido por el impulso de Arizmendiarrieta y recomendados en el Modelo inclusivo participativo de empresa. Modelo que se caracteriza por tratar de conciliar la competitividad de las empresas y organizaciones con el desarrollo de las personas que en ellas trabajan, que trata de sustituir la confrontación como actitud básica por una cooperación que genere beneficios para todos y que se preocupe de la comunidad en que se inserta y del impacto que tiene su actividad en el medio ambiente circundante.
Y por ello han ido siendo galardonados de forma sucesiva un total de 16 empresas y 7 entidades sin ánimo de lucro en Hego Euskal Herria
Es reseñable que dicho planteamiento responde ya a una corriente que poco a poco se va imponiendo en el mundo occidental. Tal vez porque cada vez más empresas van experimentando que los nuevos profesionales que se incorporan al mundo empresarial, además de buenas condiciones económicas, van reclamando un sentido a su trabajo, reclaman un propósito por el que merezca la pena trabajar a la empresa en la que prestan sus servicios. Y es que los nuevos profesionales han crecido en el entorno de Internet, en el que la influencia nace de la colaboración y de la reputación.
Incluso en USA, en donde tradicionalmente se ha dado un modelo económico más centrado en el beneficio a nivel empresarial e individual, los expertos del management están insistiendo en que una empresa debe generar no sólo beneficios sino también valor social si quiere ser sostenible en el tiempo. Insisten en que la definición del propósito para una empresa no es una moda pasajera sino una tendencia que, en cierto modo, tiene sus raíces en un ansia de las personas por encontrar un sentido a su existencia. Destacando entre esos expertos, como hemos recordado en estas mismas páginas, al conocido catedrático de la Universidad de Harvard, Gary Hamel que está proponiendo la Humanocracia como nuevo paradigma de organización empresarial.
Todavía no hace mucho tiempo hemos tenido la oportunidad de comprobar la tendencia que propugnamos al haber sido invitados a participar en un Seminario en el Parlamento europeo para presentar el Modelo de empresa que estamos promoviendo. A destacar, en ese sentido, la receptividad que estamos encontrando en las presentaciones locales e internacionales (la nº 200 precisamente la realizada en Roma a 27 embajadores pertenecientes al Cuerpo diplomático ante el Vaticano).
En este contexto, nos hemos preguntado si no convendría dar un paso más y buscar que este planteamiento humanizador, que entendemos es compartido por todas las sensibilidades políticas, cuente también con estímulos fiscales, centrados al menos inicialmente en las PYMES, aprovechando las capacidades que otorga a las Haciendas forales el Concierto y en Convenio Económico con el Estado.
Las medidas, que se concretarían, entre otras, en un tipo impositivo más favorable para las empresas que cumplan determinadas condiciones pudieran ser especialmente oportunas en un momento como el actual en el que los nuevos aranceles USA obligarán a mejorar la productividad de las empresas para poder seguir vendiendo en aquel mercado, para lo que el propósito común y la cohesión social para lograrlo van a ser críticas en empresas industriales de nuestro País.
Hemos de reconocer que, en primera instancia, se dan importantes diferencias en la respuesta de la clase empresarial. Así, algunos empresarios y directivos de empresas grandes rechazan la idea de que haya una discriminación positiva para las PYMES, así como que haya una injerencia de los poderes públicos en las orientaciones de la gestión empresarial. Pero, por otra parte, directivos de empresas medianas, por el contrario, opinan que esos estímulos ayudarían a que las PYMES vascas tomen un camino adecuado (ya iniciado por algunas) antes que sus competidoras de otros lugares del mundo.
Como Fundación Arizmendiarrieta deseamos seguir haciendo una contribución a ese camino de humanización de empresas y organizaciones, que además está comprobado que sirven también para mejorar su competitividad y eficiencia, de forma que se pueda ir cumpliendo el objetivo de Arizmendiarrieta de Transformar la empresa para transformar la sociedad. Lo que implicará continuar las consultas con empresarios y agentes sociales a fin de ir puliendo los planteamientos de cara a plantear, como siguiente paso, una fiscalidad singular en Navarra, como prueba piloto aprovechable posteriormente en los distintos herrialdes de la CAV.
Pero evitando caer en un buenismo ingenuo, ya que, como decía Arizmendiarrieta “no podemos, en cualquier caso, caer en un “humanismo” sin un adecuado soporte material y estructural”.
Juan Manuel Sinde
Presidente de Arizmendiarrieta Kristau Fundazioa y socio colaborador de Laboral Kutxa