Mentoring y Universidad. Grupo Noticias. José Miguel Martínez Urquijo

07/01/2024

Mentoring y Universidad

El mentoring es un instrumento para aprender haciendo, competencias

El mentoring se basa en el desarrollo de competencias no técnicas en el ámbito personal y profesional que se aprenden haciendo.

El nombre proviene de Méntor, que en la Odisea educó a Telémaco en la ausencia de su padre Ulises. Fue en 1970 cuando se extendió la figura del Mentoring a EE.UU. gracias a las escuelas de gestión, economía y otras. Sorprende su dinamismo, aceptación y rápida evolución en los últimos años, principalmente en EE.UU. e Inglaterra y también en algunos países.

Entre las definiciones de competencia, destaca: conjunto de habilidades esenciales para el desarrollo personal y profesional, que se manifiestan a través de comportamientos habituales y observables como la participación activa en grupos y la contribución comprometida y efectiva en entornos laborales específicos. Ejemplos de competencias son: el pensamiento crítico, las relaciones interpersonales, el trabajo en equipo, el liderazgo, la toma de decisiones, la gestión del tiempo, etc.

Para actuar bien no basta con tener conocimientos, hay que evaluarlos bien, saber elegir los objetivos y los profesionales adecuados y gestionar las emociones y los tiempos. Los problemas difíciles requieren la participación de un equipo compuesto de  profesionales de especialidades diferentes, y no se resuelven cuando conoces la solución sino cuando la pones en práctica. Entonces aparecen las dificultades porque entran en juego las circunstancias de la acción concreta como los deseos, las expectativas, los miedos a los riesgos y los intereses de los participantes.

Impulsor de capacidades

Las competencias no se enseñan, se aprenden haciendo. Los conocimientos sirven para resolver ejercicios y se adquieren mediante la enseñanza tradicional con discursos de una sola dirección. Para resolver problemas se requieren competencias que exigen habilidades y actitudes además de conocimientos. En situaciones de emergencia se ponen de manifiesto capacidades que la propia persona no sabía que poseía. El mentoring es un impulsor de capacidades caracterizado por una serie de rasgos:

Es una relación personalizada uno a uno, en sentido literal. El mentorizado define la evolución de sus necesidades. No hay guión establecido, el itinerario es abierto, lo gestiona el mentorizado y se apoya en situaciones reales del aquí y ahora. El mentor invierte su tiempo, comparte sus conocimientos y dedica su esfuerzo. Se ocupa, se preocupa y se compromete personalmente al desarrollo del mentorizado.

Se trata de que el profesional mentorizado disponga de nuevas perspectivas, enriquezca su forma de pensar y desarrolle todo su potencial como persona y como profesional. Para ello el mentor a) escucha atentamente para tratar de entender las preocupaciones actuales o inquietudes de futuro que expone el mentorizado, b) con su experiencia acumulada, estimula el aprendizaje del profesional mediante una mezcla de preguntas y diálogo sin presión para que el profesional compruebe por sí mismo que:

  1. a) Percibe los asuntos tal como son, sin distorsiones y desde diferentes perspectivas, b) considera las facetas de la situación, incluidos los conflictos de valores, c) se siente responsable de la situación, d) toma las acciones pertinentes y e) autoevalúa los resultados.

Se logra por esta vía que el profesional se desarrolle por sí mismo, el mentor ejerce de inspirador, de estimulador. Se pasa de la formación por el conocimiento al aprendizaje por los comportamientos.

Comportamiento ético

Ambos mentor y mentorizado tienen la obligación de comportarse éticamente en su relación y  para ello deben:

  • Promover el respeto mutuo y la confianza. Mantener la confidencialidad.
  • Vigilar por el mentor la relación con el mentorizado ya que aquél tiene la obligación de respetar los sentimientos y derechos del mentorizado.
  • Apuntar por el mentor preguntas que hagan reflexionar, retroalimentar y apreciar los retos conseguidos por el mentorizado.
  • Evitar los abusos de poder del mentor y por parte de ambos los conflictos de interés.
  • Reconocer las habilidades y experiencias que mentor y mentorizado aportan.
  • Usar adecuadamente el consejo y la retroalimentación.
  • Reconocer por el mentor las consecuciones del mentorizado.

El Mentoring en la Universidad

En las universidades españolas se extiende el mentoring como una fórmula para ayudar a los estudiantes a adquirir competencias además de conocimientos.

Se resumen brevemente las principales variantes:

  1. Mentoring para los que entran en la Universidad. Estudiantes de los últimos cursos apoyan a los estudiantes del primer curso para brindar orientación académica.
  2. Los profesores proporcionan asesoramiento académico para estudiantes. Se observa que un gran número de estudiantes a partir de segundo de carrera dejan de asistir a las reuniones de mentoring porque estiman que no les aporta lo suficiente.
  3. Mentoring profesional. Algunas universidades acuerdan con profesionales del mundo laboral para que hagan de mentores que aportan información sobre el mercado laboral, la búsqueda de empleo, las competencias adecuadas. Un caso particular lo constituye el mentoring para estudiantes con inquietudes emprendedoras

Podría resumirse el mentoring: La confianza es la base de la relación. El instrumento principal  es la retroalimentación, la escucha activa y la utilización de preguntas como norma general.

Nota Final

Tras años de desarrollo hoy muchas empresas utilizan el mentoring como fórmula para enriquecer a sus profesionales con esas competencias tan sutiles que además de enriquecer y fidelizar al profesional  contribuyen a retener el talento.

 

Jose Miguel Martínez Urquijo
Dr. Ingeniero Industrial. Mentor y miembro de la Fundación Arizmendiarrieta